Disclaimer: Los personajes de Naruto no me pertenecen, sino a su autor Kishimito-sama, este fic lo hice solo y únicamente como diversión
Parejas: SasuxNaru
Aclaraciones y Advertencia: Este fic esta basado en un cuento ruso
El príncipe Rana
Cuando las gente sabían de su pasado atreves de los cuentos, explicaban su pasado atreves de los cuentos y predecían su futuro atreves de los cuentos, el mejor lugar junto al fuego, se le reservaba siempre al cuenta cuentos…-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
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¿Qué historia nos contaras hoy? –le pregunto la pequeña al ancianoEl anciano le sonrió mientras ocupaba su silla junto al fuego, se recargo en su bastón mientras se frotaba la barbilla con su mano libre.-¿Ya les he contado la historia del príncipe que Rana?Los presentes negaron con la cabeza-Bueno, entonces se las contare… Hace mucho, en un lejano reino, un rey que tenia tres hijos…-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Había una vez un rey que tenía tres hijos. El primero se llama Itachi, un joven atractivo de gran inteligencia y muy serio, el segundo, Sai, también poseía una gran belleza, era un magnifico pintor y amaba cada una de sus obras, era bromista y alegre, muy diferente a sus hermanos y por ultimo, Sasuke, tenia un gran parecido a su hermano Itachi, era inteligente, serio, casi frío, le gustaba la soledad y la tranquilidad, los tres eran de piel blanca y cabello y ojos negros.
Un día, cuando el ultimo de los príncipes cumplió la sus 19 años, su padre los reunió y les dijo:
-Mis queridos hijos, quisiera que cada uno de ustedes se casara. Deseo tener nietos que endulcen mi vejez.
-Si es así, padre, danos tu bendición –le respondió Itachi-. ¿Con quién debemos casarnos?
-¡Y con quien? –pregunto de mala gana el menor de los tres
-Espero que sean de nuestro agrado.
El rey miro a sus hijos por unos segundos y ordeno que a cado uno se le diera una flecha.
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-¿Una fleja? –pregunto uno de los mas jóvenes -¿Para que?-Bueno, veran…-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
-Cada uno tomará una flecha –les explicó el rey-. Saldrán al campo y dispararán. Allí donde caiga la flecha, encontrarán su suerte.
Los hijos hicieron una profunda reverencia ante el rey, tomaron cada uno una flecha, salieron al campo.
-Creo que el viejo ya esta senil –dijo Sai
-Estoy de acuerdo –lo apoyo Sasuke
-Aunque así fuera, debemos cumplir con su mandato –les dijo el mayor
-Hagamos esto de una maldita vez para poder largarnos –gruño por lo bajo Sasuke
-Alguien esta ansioso por casarse –lo molesto Sai
-No, pero ya estoy arto de ver tu cara de idiota
-Niños cálmense
Después de una de sus cotidianas discusiones, tensaron sus arcos y dispararon.
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La flecha del príncipe Itachi, el hermano mayor, cayó en la mansión de un noble, cuya hijo la encontró, era un joven bastante hermoso, de lago cabello largo y rubio, su nombre era Deidara.
La flecha del príncipe Sai, el segundo hermano, cayó en el patio de un rico mercader y la recogió una de sus hijas, una pelirrosa de nombre Sakura.
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-Al menos les fue bien –dijo una de los mayores –Ambos se casarían con personas ricas-¿Y que hay de Sasuke?-Bueno el…-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
La flecha del hermano menor, el príncipe Sasuke, ascendió muy alto y se perdió de vista. El joven fue a buscarla y, luego de andar y andar sin descanso, llegó a un pantano. Allí, sobre una hoja de nenúfar, había una rana y a su lado estaba la flecha.
-Rana, –pidió el príncipe-. Devuélveme mi flecha si no quieres que te prepare para la cena.
-Te la devolveré, si te casas conmigo ttebayo- respondió la rana sin inmutarse ante la amenaza
-¿Qué dices¿Acaso voy a casarme con una rana? Estas demente dobe.
-No me digas dobe, Teme –le respondió la rana molesta
-¿Por qué tendrá que casarme contigo?
-Deberás casarte conmigo. Porque esa es tu suerte.
El príncipe Sasuke se molesto, pero comprendió que no tenía otra posibilidad. Tomó a la rana, guardó su flecha y volvió al palacio del rey, pensando que seguramente algún dios lo odiaba y esa era la razón de su mala fortuna.
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-Pobre de el, tener que casarse con una rana-Que asco –dijeron las damas a coro-Niñas –dijeron a coso los varones del lugar, el anciano dejo escapar una risita ante esto.-Pero bueno, deben saber que las cosas no siempre son lo que parecen –dijo el anciano –En fin…-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Al día siguiente se celebraron las tres bodas: la del príncipe Itachi con el hijo del noble, la del príncipe Sai con la hija del mercader, y la del príncipe Sasuke con la ranita.
Poco después, el rey hizo llamar a los príncipes y les dijo:
-Quisiera conocer las habilidades de sus esposo-les anuncio -Para mañana, cada una debe hacerme una camisa.
Los hijos se inclinaron ante el rey y fueron a transmitir la orden.
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-Ah, pero que mandón esta el viejo –dijo Sai
-No te expreses así de nuestro padre
-Bueno, al menos nosotros no tenemos como esposa a un rana –se burlo
-No molestes Sai si es que no quieres que te deje sin posibilidad de tener descendencia –lo amenazo Sasuke
-Ya, es suficiente –los regaño Itachi –Vayan con sus parejas e infórmenles lo que nuestro padre a ordenado
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-¿Cómo ara Sasuke?-Su esposa es una rana-No todo es lo que parece mis pequeños-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
El príncipe Sasuke llegó a sus habitaciones muy enojado y preocupado. La ranita, que daba saltos por el piso, se detuvo frente a él.
-¿Por qué estás tan molesto, Teme? –le preguntó
-Tu eres la razón de mi molestia usuratonkashi –le respondió –Mi padre ha ordenado que le hagas una camisa para mañana.
-¿Solo por eso estas molesto teme? –le pregunto la rana
-Es porque dudo que un dobe como tu pueda hacer algo bien
La rana prefirió ignorar eso y le dijo
-No te preocupes, Sasuke-teme. Acuéstate y duerme tranquilo, que mañana será otro día.
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Cuando el príncipe Sasuke se durmió, la ranita saltó hasta una de las torres del palacio, se despojó de su piel y se convirtió en Naruto el espíritu de la naturaleza. Era tan hermoso que ni en los cuentos había otro igual, tenia el cabello rubio y ojos azules, su piel era bronceada y en sus mejillas tenia marcas en las mejillas a modo de graciosos bigotes.-¿Qué es el espíritu de la naturaleza?-Verán, todas las cosas y seres son protegidas por algunos espíritus y Naruto era uno de ellos, un guardián encargado de cuidar a todos animales y plantas –dijo –Bueno, prosigamos con la historia¿Quieren?-Si-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Naruto el espíritu de la naturaleza aplaudió tres veces y llamó con voz melodiosa:
-¡Madrinas, nodrizas mías, no demoren ni un instante! Para mañana por la mañana debo tener una camisa, como la que usa mi padre, para entregar al rey ttebayo.
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Muy temprano, cuando el príncipe Sasuke se despertó, la ranita ya estaba saltando por la habitación. Sobre la mesa había una camisa envuelta en fino lienzo.
-¿Tu hiciste eso? –pregunto Sasuke sorprendido
-Claro que si ttebayo¿Quién mas?
-Me sorprende que un dobe como tu pueda hacer algo bien
-Ya lárgate teme y entrégale eso al rey Dattebayo
El príncipe Sasuke, sonrió, no lo admitiría pero estaba feliz de ello, fue a ver a su padre. El rey recibió los regalos de los tres hermanos.
El príncipe Itachi desenvolvió la camisa que traía.
Una camisa sencilla de manga larga y cuello redondo, demasiado simple, cuando el rey la vio, dijo:
-Esta camisa no es digna de un rey.
Luego desenvolvió la camisa el príncipe Sai, esta era demasiado larga, tanto que mas que camisa era como un camisón. El rey la vio y dijo:
-Esta camisa sólo sirve para ir al baño.
Llegó entonces el turno del príncipe Sasuke. La camisa que mostró al rey era una prenda de seda con bellos bordados en oro y plata y brillaba como el sol mismo.
-¡Esta camisa es para lucirla en las fiestas! –exclamó el rey al verla.
Los hermanos mayores se alejaron murmurando:
-Debemos tener cuidado con esa rana
-No es una rana sino una bruja.
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Unos días más tarde, el rey volvió a llamar a sus hijos y les pidió:
-Quiero que para mañana sus esposo me horneen un pan. Me gustaría saber cuál de ellos cocina mejor.
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-¿Ese rey no tiene nada que hacer que no sea molestar a sus hijos?El anciano sonrió-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
El príncipe Sasuke regresó a sus habitaciones. Al ver su cara de molestia, la ranita le preguntó:
-¿Y ahora que te pasa, teme?
-El rey ha ordenado que le hornees un pan para mañana.
-No te preocupes, príncipe teme. Acuéstate y duerme tranquilo, que mañana será otro día.
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-Mientras tanto, las parejas de los hermanos mayores se burlaban de la rana y anticipaban que no podría cumplir la orden del rey. Sin embargo, enviaron a una vieja criada para que la espiase y les contara cómo horneaba el pan.-Que tramposas –dijo uno de los mayores-Que ruines –dijo otro-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Pero Naruto era muy perspicaz y se dio cuenta de que la estaban espiando. Por eso, preparó la masa y la echó por un agujero que había en lo alto del horno.
La criada corrió a contar lo que había visto y las parejas de los príncipes hicieron exactamente lo que había hecho la ranita.
Un rato después, la ranita saltó hasta la torre del palacio, se convirtió en Naruto el espíritu de la naturaleza y aplaudió tres veces, como había hecho la vez anterior:
-¡Madrinas, nodrizas mías, no demoren ni un instante! Para mañana por la mañana debo tener un pan esponjoso y blanco como el que comía en casa de mi padre.
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Cuando el príncipe Sasuke se despertó, el pan ya estaba sobre la mesa. Era una hogaza bordeada con arabescos y coronada por una ciudad con sus murallas.
El príncipe Sasuke estaba asombrado ¿Cómo era posible que esa pequeña rana pudiera crear aquella maravilla, dejo de cuestionarse, envolvió cuidadosamente el pan y se lo llevó a su padre.
El rey puso cara de disgusto al ver los panes que traían los hermanos mayores. Sus mujeres habían vertido la masa en el lugar incorrecto del horno y el pan había quedado tan quemado y duro que mas que pan parecía carbón. El rey ordenó que se lo dieran a los cerdos, aunque dudaba que estos pobres animales pudieran digerir aquello.
Cuando el príncipe Sasuke le entregó su pan, el rey exclamó:
-¡Este pan es para comerlo en un banquete!
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-Jajaja, se lo tienen merecido –se burlaron los niños-Si, es verdad –los apoyo el anciano -.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Al día siguiente el rey decidió celebrar un banquete en el palacio. Los tres príncipes debían asistir con sus esposos.
Una vez más el príncipe Sasuke regresó a sus habitaciones. La ranita interrumpió sus saltos y le preguntó:
-¿Ahora que quiere tu padre ttebayo¿Acaso el rey te hizo algo?
-Dobe¿Cómo quieres que no esté así? Mi padre ha ordenado que vaya contigo al banquete. Dime¿crees que puedo mostrarte a los invitados?
-No te preocupes, teme –le respondió la ranita-. Ve solo al banquete y yo te seguiré. Cuando oigas retumbar truenos, pero dile a todos que no se asusten. Si alguien te pregunta algo, le dirás: “Es mi esposo rana que viene se acerca”.
Así lo hizo el príncipe. Al verlo llegar solo, sus hermanos, cuyos esposos lucían hermosos trajes y tocados elegantes, se burlaron de él.
-¿Por qué no ha venido tu esposo? Podrías haberle traído envuelto en un pañuelo –dijo el príncipe Itachi.
-¡Para encontrar una belleza semejante habrás tenido que recorrer todos los pantanos! –agregó el príncipe Sai.
-Como me sigan molestando les daré un boleto directo al infierno ¬¬
-Tranquilo hermanito, solo broméanos
-Habla por ti Itachi XD
El rey, sus hijos, los esposos y los invitados se ubicaron en las engalanadas mesas y dio comienzo el banquete. De pronto, el sonido de un trueno estremeció a todos. El príncipe Sasuke los tranquilizó:
-No teman, es... Mi esposo rana quien se acerca
-¿Tu esposo rana? –se burlo Sakura, la esposa de Sai
-¿Entrara salando? –pregunto Deidara, esposo de Itachi
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-Ambos consortes, buscaban a la pequeña criatura, esperando encontrarla saltando por el suelo, pero...-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Ante la puerta del palacio real se detuvo un magnifico carruaje de oro y marfil, tirado por seis magníficos caballos blancos. De su interior descendió Naruto el espíritu de la naturaleza, vestido con un traje color de cielo cuajado de estrellas de plata. Sobre su pelo lucía la luna clara. Estaba tan hermoso que no parecía real.
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-Cuando Naruto entro, tanto los invitados como la familia real quedaron sin palabras ante tal visión.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Al verlo Sasuke se acerco a el y le ofreció su brazo para juntos dirigirse a ocupar su sitio en la mesa.
La comida transcurrió entre alegres bromas y exclamaciones de admiración por la belleza del esposo del príncipe Sasuke.
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En un momento, Naruto bebió un sorbo de vino de su copa y echó el resto del contenido en su manga izquierda. Luego se sirvió un ala de cisne, comió la carne y guardó los huesos en su manga derecha.
Las parejas de los príncipes mayores la observaban atentamente y se apresuraron a imitarle.
Al terminar la cena, todos se dirigieron al salón de baile. Naruto el espíritu de la naturaleza tomó de la mano al príncipe Sasuke y comenzó a bailar con tanto ritmo y tanta gracia que los invitados se quedaron impresionados. Luego sacudió la manga izquierda de su traje y ante ella apareció un lago. Al sacudir la manga derecha, surgieron varios cisnes con plumaje blanco como la nieve y comenzaron a deslizarse suavemente sobre la superficie del lago. El rey y sus invitados no cabían en sí de asombro.
-Es asombroso –dijo Itachi
-Si –lo apoyo su hermano, que por primera vez se había quedado sin palabras.
-Aun no han visto nada –dijo Deidara
-Es verdad nos toca bailar a nosotros –hablo la pelirrosa
Las parejas de los príncipes mayores también salieron a bailar. Sacudieron una manga y salpicaron a los invitados con vino. Sacudieron la otra y los huesos salieron disparados en todas direcciones. Uno de ellos le dio en un ojo al rey
-¿Pero que pretenden¡¿Matarme! –les grito indignado -¡Fuera de mi vista, Largo!